Cuentos estrambóticos

Cada noche me toca inventarme un cuento para Pollito. Suelen ser de "pímpipes y pinsesas", pero hay días en que me pide cosas raras de verdad......

• De un gusano que se quería comer un caracol pero el caracol le picaba la lengua. Toma ya.... En este cuento Pollito y Papá Oso acababan bajando al pobre gusano hambriento a la calle, para que pudiera comerse las hojas de los árboles. 
• De los dos perritos de mi pijama de corazón, que jugaban. Este fue divertido, porque el cuento iba de que jugaban encima mío y yo me despertaba y les reñía y les decía que se durmieran, luego bailaban y yo me volvía a despertar y a reñirles, luego no sé qué más hacían, y el pobre Pollito sufriendo por si yo me volvía a despertar en mi cuento, y diciéndole a los perritos que se durmieran ya, jajaja!!! 
• Hoy le he contado uno de un nene que no tenia nariz. En el cole todos los niños tenían, así que el nene iba con su mamá a una tienda de narices donde habían narices de elefante, de payaso, de cerdito, de pinocho.... al final encontraban una de nene.

Y luego están los cuentos habituales (bueno, habitual es la temática, el cuento nunca es el mismo.... de hecho hay veces que me pide alguno que ya le conté pero me cuesta acordarme del argumento y me lo tengo que reinventar)  

• Los pímpipes y las pinsesas, que normalmente somos nosotros tres, o sólo Pollito y yo, o sólo Pollito y Papá Oso, y vivimos en un castillo con caballos y vamos al parque o a la playa o a donde sea en caballo (qué pijos somos, jajaja), y todos los nenes se suben un poquito.
• De Pollito cuando tiene 4 años, o 5, o los que se quiera sumar.... aquí suele ser un súper valiente y se atreve a hacer cosas que aún le dan miedo.
• De pollitos, él y 1 ó 2 más, los amiguitos que me diga. Que están en un huevo y lo rompen para salir (o lo abro yo haciéndole una puerta y una ventana), y juegan juntos en el parque o van a casa de alguno a jugar o se van a pasear solos por ahí y se suben en un avión o cualquier cosa que se le ocurra. 
• De algún dibujo animado o algún libro que hayamos leído. Estos a mí no me gustan mucho (a él sí), porque es Papá Oso quien le lee cada noche un cuento con cuento (con libro), yo luego le cuento el cuento sin cuento, y muchas veces no sé el argumento del que me pide, porque lo hemos sacado de la biblioteca o lo hemos comprado hace poco y yo no lo he leído aún.... 

He recuperado mi imaginación...  cuando me empezó a pedir cuentos "a la carta", creo que más o menos después del verano pasado, al principio no se me ocurría nada, tenía que pensar un buen rato, o pensaba alguno durante el día y le sugería yo la temática.... Ahora ya me invento unas historias!!!